Discuten México y EU nuevo programa para refugiados
Washington/Cdmx. Funcionarios estadunidenses y mexicanos están discutiendo un nuevo programa de refugiados de Estados Unidos para algunos solicitantes de asilo no mexicanos que esperan en México, como parte de los intentos del presidente Joe Biden de abrir más vías legales para la migración, dijeron cuatro fuentes.
El programa probablemente estaría abierto a refugiados cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos, precisaron. Los migrantes tendrían que demostrar que estaban en México antes del 6 de junio para poder acogerse al programa, reveló una de las fuentes.
Las fuentes, un funcionario estadunidense, un funcionario mexicano y dos personas familiarizadas con el asunto que hablaron bajo condición de anonimato, aseguraron que la cuestión seguía siendo objeto de debate y que no se había tomado ninguna decisión definitiva. No está claro cuántas personas podrían beneficiarse del programa.
Cientos de miles de migrantes de esas cuatro naciones han pasado por México en ruta hacia Estados Unidos durante la agitación política y económica de los últimos años, poniendo a prueba los recursos de ambos países y ejerciendo presión política sobre Biden.
El plan permitiría a los migrantes que reúnan los requisitos para obtener el estatus de refugiado entrar a través del programa estadunidense de reasentamiento, que sólo está disponible para solicitantes en el extranjero, dijeron las fuentes.
A diferencia de la mayoría de los inmigrantes que solicitan asilo tras entrar en Estados Unidos, los refugiados reciben autorización de trabajo inmediata y prestaciones del gobierno, como ayudas para vivienda y empleo.
Los refugiados que utilizan el programa de reasentamiento estadunidense pueden solicitar convertirse en residentes permanentes en el plazo de un año, lo que ofrece más estabilidad que otras opciones. Para ser aprobados, deben demostrar que sufren persecución por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un determinado grupo social u opinión política.
Ningún acuerdo: cancillería
La cancillería mexicana indicó que mantiene comunicación constante con Estados Unidos para ampliar la movilidad laboral y la protección a refugiados. Afirmó que ha sostenido discusiones sobre diversos programas y políticas, salvaguardando siempre la soberanía nacional.
Sin embargo, México no ha llegado a ningún acuerdo con Estados Unidos, aclaró la cancillería.
La administración Biden abrió nuevas vías para que los migrantes entren en Estados Unidos como parte de una estrategia más amplia para disuadir a la gente de cruzar la frontera de forma irregular.
Los indocumentados que esperan en México pueden solicitar la entrada a través de una aplicación para teléfonos inteligentes y pedir asilo más tarde, pero las citas se acaban rápidamente.
En virtud de otro programa de Biden, los cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos pueden solicitar entrar en Estados Unidos por vía aérea si tienen patrocinadores estadunidenses.
Pero esas rutas no proporcionan los mismos beneficios disponibles para los refugiados ni un camino directo hacia la residencia permanente y la eventual ciudadanía.
En abril, el gobierno de Biden Anunció Que Se Proponía Admitir A 40 mil refugiados de América Latina y el Caribe en los años fiscales 2023 y 2024, duplicando una meta anterior. Hasta el 31 de mayo habían llegado unos 3 mil 400.
A algunos activistas les preocupa que la atención prestada a América Latina pueda ralentizar el trámite de aquellos procedentes de otras partes del mundo, incluidos los que ya están a la espera de aprobación.
La iniciativa en discusión sería un programa de refugiados de “prioridad dos”, comentaron las fuentes, similar al que se abrió para los afganos en 2021. Tales programas permiten a ciertos grupos de personas solicitar el estatus de refugiado directamente sin necesidad de una remisión de Naciones Unidas.
A pesar de las discusiones, México tiene preocupaciones significativas, señaló el funcionario mexicano.
Si el programa anima a más migrantes a entrar en México, podría poner a prueba los ya limitados recursos del país para hacer frente a los migrantes, explicó.
Una de las principales preocupaciones es dónde se procesaría a los inmigrantes, según el funcionario.
Si Estados Unidos utilizará sus instalaciones consulares existentes, el plan podría funcionar, pero cualquier nuevo centro estadunidense en México para este fin sería políticamente tenso, advirtió.
Las decisiones pendientes también requerirán la participación de la próxima titular de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena.
Con Información La Jornada