Sauri, Ochoa y Labastida defenderán al PRI; sostienen que Alito busca apoderarse

Cd. México (AGENCIAS).- Tres exdirigentes del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, como Dulce María Sauri, Francisco Labastida y Enrique Ochoa, reprobaron la actitud dictatorial de Alejandro Moreno y advirtieron que los tiene sin cuidado el amago que les hiciera el presidente nacional de su partido al adelantarles la posibilidad de expulsarlos.

Sauri Riancho explicó que el amago de Alito Moreno de expulsar del PRI a sus detractores, es una táctica para apoderarse del tricolor, para no enfrentar los señalamientos en su contra de manera realista derivados de la intención del dirigente de buscar su reelección hasta el año 2032.

“Es la táctica del ladrón para poderse robar al PRI. Realmente lo que él está señalando, si tiene elementos para poder fincar una acusación que derive en mi expulsión del partido, que los presente ante las instancias correspondientes y yo me defenderé; veremos qué resultado hay, pero yo del PRI no me voy”, mencionó.

A este respecto, politólogos opinan que es incierto y difícil el futuro del PRI en caso de que siga la dirigencia nacional encabezada por Alejandro Moreno Cárdenas, pues hay una deuda política e histórica que recae en ese partido.

El experto en política, catedrático de la UNAM, Ulises Corona, citó que Alejandro Moreno debe asumir los costos de los últimos años y hablar con franqueza, ya que tiene una gran deuda con el país y sus habitantes por la historia pasada; “pero si en ello, él decide seguir adelante, pues que tanga mucha suerte, pues se necesita una oposición fuerte y con credibilidad”.

Por su parte, Francisco Labastida, candidato presidencial priista en las elecciones del año 2000, dijo que, de reelegirse Moreno Cárdenas, él sí renunciará al partido tricolor.

Labastida Ochoa lamentó que su partido no esté cumpliendo con ninguna de sus premisas y que no tenga democracia ni justicia social; está negando sus creencias, consideró: “Yo diría que en este momento lo que haga el partido en el Congreso es irrelevante, porque el poder que tiene Morena hace innecesaria la postura del partido”.

Enrique Ochoa, también expresidente nacional del PRI, quien se dijo preocupado por la situación de su partido. Coincidió con Labastida en que “hubo una asamblea ilegítima —el domingo pasado, cuando se reformaron los estatutos partidistas que posibilitan la reelección— porque no se incluyeron los distintos grupos y fuerzas dentro del partido; se hizo una asamblea en lo oscurito, a modo”.

Reprochó que todos los días “he visto que han tenido la apertura para estar atacando y difamando al partido y debo ser muy preciso. No amenacé a nadie, sólo se ordenará el partido”. Aun así, volvió a advertir que, si hay causales que ameriten la expulsión del partido, las presentará a las instancias correspondientes.